Adivinando (3)
Si aún dudas de mis dotes de adivinación, piensas que son trucos matemáticos o te has fatigado mucho haciendo operaciones, he aquí otro ejemplo sencillo. Solo tienes que pensar en una de las seis cartas que te presento, barajarlas (acción imprescindible ya que, los taquiones que generes inconscientemente al pulsar sobre la carta elegida, al igual que la presencia del ser querido genera una reacción involuntaria e inconsciente que hace que nuestro comportamiento varie involuntaria e inperceptiblemente, han de viajar, como de todos es sabido, a velocidad mayor de la de la luz y alterar el estado de percepción extrasensorial de esa carta concreta frente al resto) pulsando sobre ellas con el ratón y después la haré desaparecer.